"Averroes dejó la pluma. Se dijo (sin demasiada fe) que suele estar muy cerca lo que buscamos..."
Jorge Luis Borges - El Aleph
Borges le hace decir a Averroes, aunque no se si es fiel a la historia o solo un recurso que utiliza para ocultar sus propias conjeturas, lo que muchas veces es la causa de que nos empecinemos en una búsqueda que nunca llega a su fin. Intuir esa cercanía es lo que nos mantiene en ese camino, aunque bien pudiera ser un artilugio del creador del juego para mantenernos ocupados o, acaso, alejados de la verdad, que de tan evidente, no logramos verla... cegados por nuestra apreciación de que debería ser invisible y estar oculta tras siete velos, velos que solo los iniciados pueden descorrer.
Quizás las dos cosas sean verdad... o, quizás, ninguna.
pienso que tiene que ver con esto de aguzar los sentidos, poner atención al mundo. Por ejemplo al olfato y también al tacto lo asocio con los instintos y con Sun. Al oído con K'an y eso se ve bien en el 4, el oído interior. La verdad está adentro y el oído reconoce afuera la verdad que está adentro y a la inversa, agua bajo montaña. El ojo Li es ver lo que no habíamos visto en la cosa y también ver el recurso que está al alcance de la mano. Nadie ve eso, van y compran lo que otros hacen para ellos.
ResponderEliminarTodo eso lo teníamos y lo hemos perdido con la vida en la ciudad y la sociedad de consumo. Pero si lo teníamos lo podemos recuperar. Todo eso está cerca, está a nuestro alrededor. Lo que sucede es que no lo vemos, no lo oímos y no lo olfateamos. Tenemos embotados los sentidos. Ese es el estado de alerta, de despierto a que se hace referencia en los libros herméticos. Hermes está siempre alerta sin estar alerta, está despierto. 16.4 al 2.
Puede tener que ver con eso también Marta, si. Acuerdo con vos que la verdad está adentro. En mi caso, alguna malformación me impide frenar ante lo que veo.
ResponderEliminarMuchas veces pienso que es como si quisiera ver algo bajo la superficie del agua, algo que alcanzo a ver pero sin la precisión suficiente y entonces intento correr el agua con las manos y, al hacerlo, toda la superficie se llena de ondas y ya veo menos que al principio. Debería, lo se, dejar que la superficie se serene... la del agua y la de la razón. Debería...