viernes, 4 de julio de 2014

Diarios




Mi corazón al desnudo.
Es imposible recorrer una gaceta cualquiera, de no importa que día o que mes o que año, sin encontrar a cada línea los signos de la más espantosa perversidad humana, al mismo tiempo que las más sorprendentes jactancias de probidad, bondad, caridad, y las afirmaciones más descaradas sobre el progreso y la civilización.
Todo periódico, de la primera a la última línea, no es más que un tejido de horrores. Guerras, crímenes, robos, impudicias, torturas, crímenes de los príncipes, crímenes de las naciones, crímenes de los particulares, una borrachera de atrocidad universal.
Y es con ese repugnante aperitivo que el hombre civilizado acompaña su comida cada mañana. Todo en este mundo suda el crimen: el diario, la muralla y el rostro del hombre.
No comprendo que una mano pura pueda tocar un diario sin una convulsión de repugnancia.

Charles Baudelaire - Diarios Íntimos


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